Un repaso de la historia de Loreto y de la selva peruana revela que políticas de incentivos fiscales, beneficios o exoneraciones tributarias han sido una constante como medios para coadyuvar al crecimiento y al desarrollo económico. ¿En qué consiste este mecanismo excepcional de promoción del desarrollo conocido también en los lugares que comprende como zonas económicas especiales (ZEE) o zonas francas (ZF)? ¿Qué resultados ha tenido en Loreto y por qué sigue siendo importante para operadores políticos, económicos, empresariales o profesionales de la zona?
Los incentivos fiscales o exoneraciones tributarias
Las exoneraciones o incentivos tributarios son dispositivos legales gubernamentales (del gobierno central o el Congreso) emitidos con la finalidad de favorecer o estimular a determinados sectores, actividades, regiones o agentes de la economía bajo criterios de aislamiento geográfico, prioridad en la atracción de inversiones o como medidas de reactivación económica.
En el caso de la selva peruana se dieron por las tres razones mencionadas, pero esencialmente por su condición de lejanía respecto al resto del Perú, especialmente de Loreto. Región que fue precisamente una de las últimas que disfrutó de dicho mecanismo gubernamental de fomento del desarrollo, aunque no en la forma esperada.
Últimos mayores beneficiarios de incentivos tributarios en Loreto
Pues, los mayores beneficiarios de dicho mecanismo de promoción del desarrollo fueron comerciantes y empresarios en lugar de la población en general (como debe normalmente ocurrir con cualquier dispositivo emanado desde el Estado).
En efecto, al amparo de la Ley de Promoción e Inversión en la Amazonia N.º 27037 del 30 de diciembre de 1998, cobraban el Reintegro Tributario que consistía en la devolución a través de la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (SUNAT), del Impuesto General a las Ventas (IGV) que pagaban al comprar a empresas o sujetos afectos del resto del país, los bienes o productos que debían comercializarse o consumirse en Loreto a un precio accesible; teniendo en cuenta el costo que implicaba traerlos vía aérea o por carretera y ríos, desde la costa y sierra del Perú.
Iquitos la ciudad más cara del Perú
Pero no fue precisamente lo que ocurrió porque la capital de Loreto, Iquitos, fue por muchos años la ciudad más cara del Perú; y no solo desde la derogatoria de los beneficios contemplados en la mencionada Ley N.º 27037 cuando empresarios, comerciantes y sus acólitos vociferaron, además, que Iquitos sería una ciudad aún más cara de lo que ya era.
Lo cual, sin embargo, no significa que dicha forma de fomentar el crecimiento y el desarrollo de determinadas zonas geográficas sea negativo o vano.
¿Qué falló con los beneficios tributarios?
En el caso de la selva peruana y de Loreto en particular, lo malo no fue solo el hecho de no dotar a tales medidas del tiempo y la continuidad necesarios (entre 30 y 40 años), sino también no complementarlas con la concreción efectiva de las otras medidas que al mismo tiempo son necesarias y eran sutilmente mencionadas en el papel: la necesidad e importancia de dotar al lugar de la infraestructura necesaria (energía y agua competitiva, mejor conectividad aérea, terrestre o fluvial, zonas industriales, etc.).
A la generación de parques industriales debe apuntar toda política de exoneraciones tributarias. Parque industrial Oradel. Autor: Oradel. |
Cómo atraer empresas e inversiones a largo plazo
Porque solo de dicha forma pueden atraerse a sectores y/o lugares determinados, empresarios interesados en invertir a largo plazo con tasas de impuestos (a la renta, a la compra de activo fijo o a la importación de maquinaria y equipo) más ventajosos respecto a otras zonas geográficas; y, de esta manera, generar empleo permanente y de calidad sobre la base de empresas o industrias que exploten sostenida y sosteniblemente los recursos potenciales de Loreto: madera, cultivos permanentes (palma aceitera, coco, cacao o café), turismo o petróleo.
Clusters como objetivo de políticas de desarrollo
De este modo propender al surgimiento de los denominados clúster. Término atribuído al académico y economista Michael Porter, tras su observación de la realidad y convertido posteriormente en herramienta de desarrollo regional, al identificar a un grupo de empresas e instituciones interrelacionadas, concentradas geográficamente, que compiten en un mismo negocio.
Un cluster incluye generalmente a empresas situadas en varios escalones de la cadena de valor, a empresas productoras de bienes y servicios complementarios, y a instituciones y organizaciones relacionadas (universidades, centros de investigación, agencias gubernamentales etc.). Y constituye un modo de desarrollo económico sectorial del territorio conocido también por Agrupación Innovadora, Distrito Industrial o Polo de Competitividad, de acuerdo con el Instituto de Desarrollo Económico del Principado de Asturias, España.
Las exoneraciones nuevamente a debate en Loreto
El pasado 2024 desde el empresariado y algunos colegios profesionales, se escucharon nuevamente voces pidiendo el retorno de beneficios fiscales; no obstante estar vigente desde el 2019 la Ley de Promoción de la Inversión y Desarrollo del Departamento de Loreto N.° 30897 publicada el 28 de diciembre de 2018, que dejó sin efecto los beneficios tributarios vigentes hasta el 2018, y se creó en su lugar un fideicomiso para que administrado por el Gobierno Regional de Loreto (GOREL), contribuya al crecimiento y desarrollo económico de la región (sobre la base de un modelo que venía funcionando en otros departamentos de la selva del Perú). Por ello, sería oportuno conocer no solo la forma en que se ha gastado o invertido el dinero de dicho fideicomiso, para evaluar si se consiguieron o no los objetivos propuestos al derogar el reintegro tributario y demás beneficios.
Sino también para saber si el nuevo orden tributario que se está proponiendo, contiene los vicios o carencias de los anteriores modelos de desarrollo regional sustentados en incentivos o beneficios tributarios. Sólo así habrá certeza de que la nueva legislación en aras del desarrollo de Loreto podrá implantarse y desarrollarse con eficacia y será, por ende, en beneficio de la mayor cantidad de sus ciudadanos, no solo de una pequeña minoría.
Un acuerdo o contrato social en aras del desarrollo
Para lo cual, no obstante, se vislumbra necesario un acuerdo o compromiso de la mayor cantidad de personas e instituciones serias e importantes de la región (entes estatales, sociedad civil, colegios profesionales, partidos políticos, centros de educación e investigación, Ong´s, las iglesias, etc.), para asegurar no solo la preparación y emisión de una moderna y racional nueva normativa de incentivos tributarios, sino también para garantizar su continuidad (por unos 30 o 40 años) al margen del término de la gestión o mandato de gobernadores, alcaldes o congresistas.
Dicho contrato social que podría ser promovido desde el Gobierno Regional de Loreto o la Presidencia del Consejo de Ministros, serviría además como un espacio de debate serio y alturado y, por ende, contaminado en lo mínimo por creencias, ideologías o tendencias que poco o nada tienen que ver con la evolución del conocimiento y la ciencia, y más cercanos por tanto al sentido común y la lógica que a la vil ignorancia, el mayor mal de las sociedades.
Errores que ralentizan el progreso de Iquitos y Loreto
Solo así no podrán repetirse o serán menos probables sentencias en contra de importantes inversiones agroindustriales, en contra de proyectos para paliar el limitado transporte en la selva peruana (ej. la paralización del proyecto de Hidrovía Amazónica); o que inescrupulosas autoridades hagan lobby o grupos de presión, no en pro de la mayoría de la población como correspondería, sino en beneficio de una empresa privada cuya entrada en funcionamiento terminó de cancelar el proyecto de Interconexión de Loreto al Sistema Eléctrico Interconectado Nacional.
De no haberse paralizado dichos proyectos, Loreto tendría ya casi solucionados dos de sus mayores limitaciones históricas: el problema de accesibilidad por la dificultad en el transporte, y la deficiente y cara energía eléctrica. Pues, el mayor objetivo del primero era que los mayores ríos amazónicos, sean transitables las 24 horas de los 365 días del año; y del segundo que Loreto no siga padeciendo interrupciones eléctricas como hace más de 40 años, y que su población no siga pagando una de las tarifas eléctricas más caras del Perú.
Política, diálogo y buena disposición en beneficio de todos
En resumen, se trata de hacer simplemente política. La que según Wikipedia es el arte, doctrina o práctica referente al gobierno, promoviendo la participación ciudadana al poseer la capacidad de distribuir y ejecutar el poder según sea necesario para garantizar el bien común en la sociedad; un conjunto de actividades que se asocian con la toma de decisiones en grupo, u otras formas de relaciones de poder entre individuos, como la distribución de recursos.
En un contexto, en suma, en el que todos puedan contribuir con propuestas y decisiones razonables, al progreso de la sociedad; y no tercamente oponerse a alguna medida necesaria para lograrlo por razones meramente políticas, ideológicas o religiosas.
Querer crecer no significa progresar a costa de todo
Lo cual no quiere decir que no debe existir crítica cuando exista algún error o mal hacer en alguna política o acción orientada o relacionada con el progreso; como por ejemplo leyes o reglamentos, accidentes empresariales que perjudican a la población o el ambiente natural, o atentados contra intereses personales o empresariales. Todo lo cual hay que denunciarlo, proponiendo en lo posible la mejor solución al respecto.
De esta manera, por lo demás, no recibirá más crítica o rechazo el individuo o empresa que solicita autorización legal para -por ejemplo- explotar el oro que pulula en los ríos de la selva peruana, que las decenas de personas y empresas informales que explotan descontroladamente el recurso todas las semanas desde hace varias décadas. Simplemente porque los primeros explotaran sosteniblemente el oro, por haberse comprometido hacerlo ante las autoridades y entidades peruanas; algo que no les ha convenido hacer hasta ahora a los segundos por razones económicas, o por mera comodidad o irresponsabilidad.
*Artículo publicado también en el Diario La Región de Iquitos el 04 de enero de 2025.