Mariano Rajoy, líder del Partido Popular, en un mitín en Cataluña (Photo credit: Wikipedia) |
La política en España y otros países del primer mundo es, en general, mejor que en el Perú y otros países en vías de desarrollo, era lo
que me habían inculcado desde pequeño y lo que creía por tanto antes de venir a Alicante, una ciudad del Mediterráneo español, capital de una
de las tres provincias de la Comunidad Valenciana.
¡Qué equivocado estaba!, pues lo
contrario es lo que percibo residiendo en dicha ciudad, no sé si por la
gravedad de la crisis económica actual, o por simple
continuación de la costumbre que sería también intrínseca a la sociedad
española. En donde los políticos de oposición no hacen siempre críticas
constructivas al gobierno que no integran, o no reconocen igualmente sus logros
y aciertos con hidalguía.
Mariano Rajoy como líder del Partido Popular (PP) y la oposición
No recuerdo y/o conozco el
proceder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) cuando era oposición,
pero puedo recordar que al actual líder del PP, don Mariano Rajoy, le consideraba
un político modelo al escucharle en la TV y leer sus entrevistas mientras era
ministro de Gobierno del entonces presidente José María Aznar allá por el año
2000. Hoy estando en la oposición, sin embargo, le veo protagonizar escenas que
me suelen traer a la memoria episodios políticos que eran comunes entre el
partido gobernante y los de la oposición en mi Perú natal.
La economía española y la crisis global
Lo cual, luego de ver las
quiebras de grandes y pequeñas empresas y entidades bancarias, aseguradoras y
financieras en Europa, Estados Unidos de América y el resto del mundo, mientras
que en España no se producen casos similares (exceptuando lo de Caja de Castilla la Mancha, al parecer más por motivos
políticos que económicos), me resulta incomprensible, injusto y hasta
contradictorio.
Desde el Partido Popular se
insiste además en lo mal que andaban las cosas en España desde mucho antes que
empezara la actual crisis mundial, ignorándose –entre otras cosas- la
trascendencia del sector de la construcción en la estructura económica y
productiva española y, por tanto, su alcance en la misma en situaciones de
crisis como la actual. Y todo en momentos en los que empresas españolas como el
Banco Santander, se permiten incluso adquirir nuevas
entidades financieras fuera de territorio hispano.
El déficit fiscal como tema de debate
Hasta hace poco se criticaba por
lo demás con vehemencia el creciente endeudamiento y déficit fiscal español,
junto a todas las medidas gubernamentales dirigidas a hacer frente la situación
apremiante, tildándolas de inútiles y/o mal elaboradas.
Y como contradiciendo tal
posición, reprueban estos días el importe de la ayuda que a aquellos parados
que agotaron su subvención de desempleo, dará el Gobierno por un plazo de seis
meses. Al cual ven como insuficiente y que por tanto debería ser mayor; estando
de este modo ahora sí de acuerdo con el aumento del déficit
fiscal o el endeudamiento español, al ser esa la vía más factible de
financiar aquella y otras ayudas sociales en momentos de dificultades
económicas como los actuales.
Consideración final
Habría mucho más que decir al
respecto: el caso Gürtel, la manera en que se enfocó el problema
terrorista en las épocas previas a las Elecciones Generales de marzo de 2008,
etc. Pero terminaré esgrimiendo que, de acuerdo a lo descrito, la clase
política suele ser la misma aquí o allá, en Chile o en China, de acuerdo a la
condición universal de la especie humana.